20 de Noviembre, Bodorrio en Shanghai

Nosotros solo fuimos invitados al banquete, así que nos perdimos toda la parafernalia que hacen los novios en su casa, pero nos pusieron las fotos de todo durante el banquete. Llegamos al hotel y estaban los novios en la puerta, haciéndose fotos con cada uno que iba entrando, quise hacer una foto, pero no podíamos pararnos, así que a ver si conseguimos la del fotógrafo oficial…

Nos sentaron en medio y medio, para que se nos viese bien desde cualquier punto, y nos dieron pétalos para echar al paso de los novios:

Fotógrafo cazado:

Y entonces subieron los novios. 

Entra el novio, se cierran las puertas, se presenta al novio, saluda y aquí descubrimos el por qué de tanto caminar hacia atrás por la calle! Resulta que se preparan para ser dam@s de honor y poder ir echando los pétalos sobre la alfombra caminando hacia atrás! Practican cantidubi! jaja:

Estos mismos son quienes abren las puertas a la novia y el padrino, 

Que ahí mismo hace entrega de la novia, para que recorran la alfombra juntos, hasta un altillo donde se les vea bien para toda la “ceremonia”:

Se ponen los anillos (ojo, especial atención a las uñacas de ella!):

Los enseñan al público:

Y se besan:

El padrino dice unas palabras (completamente emocionado, le costaba hablar, así que pude entender algunas cosas, mucho de felicidad, pareja y amor…si, soy un lince, de qué iban a hablar!):

Le hacen un regalo a las madres de los novios:

Y leyó un discursito el jefe de la novia, él en inglés, la niña en chino…cabrona, cómo hablaba la tía! Y yo que balbuceo hasta el “Ni hao”:

Después viene otra chinada que les encanta, que por cierto ya vi en la vietnamita, llenar la pirámide de copas:

Y brindar al público, esta parte les encanta y luego brindan mesa por mesa, haciendo el “canbei”, o lo que viene a ser lo mismo, “Hidalgo, Hidalgo…”

Y se marchan, y más tarde vuelven y resulta que se ha cambiado, ella, de vestido, y entran precedidos de los amigos, que portan velas con forma de corazón:

Esas velas van dejándolas en cada una de las mesas de los invitados, para que seamos partícipes de su amor:

Cortan la tarta (igual que la vietnamita):

Y aquí viene el friki aporte chinuá: rellenan el grupo de copas, pero esta vez con forma de corazón:

Y para más inri, el color del líquidillo…les encaaaaaaantan estas cosas de brillantitos y colores llamativos, parecen polillas, van a la luz!:

Hubo quién se emocionó y todo con esto último:

Y después, se lanzó el ramo y allá fueron como locos a por él(los españoles no íbamos a ser menos), yo aproveché que tenía que sacar la foto para no ser candidato a cogerlo, jeje:

Después de esto, quien cogió el ramo y su (creemos que) pareja, subieron a decir unas palabras, esto nos pareció de mal gusto (prejuzgando y sin saber de qué hablaban), ¿cómo se atreven a robar así el protagonismo a los novios? Nosotros los habríamos corrido a gorrazos, jeje.

Los novios se vuelven a marchar y vuelven y esta vez, ambos se cambian de traje y vestido, con el clásico “chibao”:

Y vienen a hacerse los “canbeis” mesa por mesa:

Y finalmente, el novio hace algo a lo que no le encontramos explicación y tampoco tuvimos momento de preguntar a qué se debía… aspirar de una botella con 6 cigarros…quizá sea porque 6 es uno de los números de la suerte pero…yo es que lo del tabaquismo, nunca lo entenderé:

Antes de irnos pudimos hacernos una foto con los novios, miranos, qué majetes…

Y todo esto en el transcurso de 3 horas, rapidito, no como en España que venga de comé y de bebé…s’ageraos somos!